lunes, 8 de diciembre de 2014

Robocop - 1987 - Paul Verhoeven

Primera versión, muy ochentera, de la historia en la que Murphy pasa de policía hecho de carne a híbrido de terminator y persona.

Está contada de manera bastante salvaje; prácticamente todos los personajes son unos dementes, excepto el propio Murphy y su compañera. Los demás, principalmente ejecutivos, delincuentes y ejecutivos-delincuentes, viven completamente fuera del mundo de la normalidad.

Pero, ¿es el mundo normal? Según transcurre la película se van abriendo pequeñas ventanas al futuro Detroit en el que los mafiosos campan por sus respetos. Matones que no por casualidad, supongo, ponen la nota de color racial, porque las personas a quienes hemos de tener miedo, al menos los secuaces, son la excepción al mundo ario de los protagonistas. ¿Se puede hablar de racismo? Pues claro, si bien uno sutil y de contexto.

Otras ventanas, que nos explican como ha cambiado el mundo, o como sigue sigue igual, son las noticias por televisión: "...el sistema de defensa pacífica se ha averiado, lanzando rayos sobre Santa Bárbara, provocando la muerte de cientos de personas, entre ellas tres expresidentes de los Estados Unidos...". Esta ironía le da cierto carácter político a la película, que, como ocurre a menudo, es profundamente conservadora, pero superficialmente demócrata (en el sentido americano de la palabra, de centro izquierda, o como se quiera llamar).

La historia es conocida: el agente Murphy es dado por muerto por quienes intentan asesinarle, pero una empresa de biotecnología lo recupera, al menos en parte, para convertirlo en una máquina defensora de la ley. Los constructores de Robocop creen también ellos haber matado a Murphy, pero él es cabezota y siempre vuelve.

Al encontrarse con sus asesinos Murphy vuelve en sí, recupera su personalidad y pasa de robot a héroe humano con brillante armadura.

sábado, 6 de diciembre de 2014

La Reforma de la Constitución

Este año la fiesta de la Constitución se ha centrado sobre todo en las propuestas de reforma.

Yo tengo muchas reservas al respecto. La primera es que no me fio de la capacidad de nuestros políticos para renovar la Constitución para hacerla más sencilla y clara (más honesta) que la vigente. Ya se dejan ver distintas opiniones según las cuales en la constitución deben incluirse los temas más variados (como ya se hizo con el tema del déficit).

Además, me temo que nuestros políticos no están preparados para el acuerdo, como tampoco lo estuvieron en el 78, de manera que, ante esta incapacidad nos darán gato por liebre; en lugar de verdadero acuerdo pondrán en fila las ideas de todos, haciendo de la Constitución un texto intratable, que tienda a decirlo todo. Como digo esto ya pasó en el 78, pero hoy sería todavía peor. Si hoy tenemos un PP que aprueba leyes que un PSOE promete derogar si vuelve al gobierno ¿En qué se basan esos mismos políticos para suponer que podrán llegar a acuerdos sobre los mismos temas (educación, seguridad) a un nivel todavía más  fundamental?

Luego está el tema del nacionalismo.

Creo que la constitución debería deshacer el sistema autonómico y servir al proyecto de una España provincial. Pero personalmente me valdría casi cualquier constitución que "cerrara" las controversias sobre las autonomías, siempre que fuera aceptada mayoritariamente por los partidos nacionalistas, lo cual significaría tácitamente el final de sus reivindicaciones durante toda una generación ¿Es esto posible? De lo contrario la reforma constitucional no sería más que otra concesión, más profunda, a favor de los nacionalismos, que al día siguiente ya estarían reivindicando nuevos cambios, o aplicaciones más radicales que las previstas.

Esta debería ser la premisa del federalismo de Rubalcaba (o de cualquier otro), el ser firmado por los partidos nacionalistas, y por lo tanto aceptado como un régimen justo, o al menos aceptable, un principio para dedicarnos a otras cosas ¡Un sueño! Pero eso significaría también el final del nacionalismo como lo conocemos, y por lo tanto parece muy difícil que se llegue a ese punto.

En conclusión una nueva Constitución escrita es algo prácticamente imposible mientras la Constitución no escrita, el promedio de las opiniones, deseos, ideales, etc. de los españoles no tome una dirección más clara. Hoy vemos un gran abanico de opiniones sobre lo que España es y lo que debería ser, incluso si debe o no seguir existiendo, pero ninguna de ellas está madura para liderar una reforma constitucional, y sin este liderazgo, sencillamente, no es posible una buena constitución.

Como se puede comprobar por la mención a Rubalcaba, este artículo lo escribí el 6 de diciembre del año pasado, en un blog de la Comunidad de El País, que hoy ya ha desaparecido. Desde mi punto de vista sigue perfectamente vigente, además el empuje nacionalista y la aparición de Podemos hace que crea más firmemente todavía en esto que escribí.

Esta mañana en la 1 de TVE han dicho algo así que "como novedad" este año el día de la constitución está marcado por la propuesta de reforma. Es que tenemos muy poca memoria, porque nuestros políticos nos la borran para convencernos de que el mundo nace cada día con sus palabras.

X-men: días de futuro pasado - 2014 - Bryan Singer

No sé qué pasa con la saga X-men; entre película y película, va dando bandazos entre lo peor y lo mejor del cine de acción, sin saber muy bien cual es el motivo. Sin duda algunos personajes y actores se van agotando, y van dejando un ambiente legendario que por sí solo no basta para sostener una película, que debe ofrecer algo más; cuando el homenaje se exagera y toma demasiado protagonismo, se corre el peligro de convertirlo en caricatura.

En este caso, además, se rompe la coherencia más básica de los personajes: de pronto, tras cientos de años siendo un joven adulto, a Lobezno le salen canas, sólo para poder diferenciar entre el lobezno de 2020 (más o menos), y el de los 70 del siglo XX, absurdo, como la justificación para mandarle a él al pasado en lugar de a cualquier otro. También necesitan romper con el final de la primera parte de esta primera generación y convertir visualmente a Xavier en heroinómano... en fin, incomprensible. Desde mi punto de vista todo parece un simple montaje comercial para conseguir más réditos de la franquicia, pero con poco que ofrecer en cuanto a historias, que necesitan tinta nueva.

Además los años 70 que nos cuentan son tan falsos como el futuro distópico, de nuevo se lleva la historia a esa época simplemente para aprovechar el tirón de los actores ya conocidos por la anterior entrega... entre ellos destaca James McAvoy, que parece sacado de otra película por la seriedad que le da a su personaje, por otra parte estúpidamente rebuscado, como los demás, para que encaje su "infierno personal", con el resto de la historia.

En fin, todo parece apuntar que Magneto tenia razón y debió haber exterminado a los humanos no mutantes cuando tuvo oportunidad, sin embargo la película se resuelve en sentido contrario, con un irenismo (ahora, a veces, se dice "buenismo") digno de mejor causa.

Es entretenida, mejor que el bodrio de Lobezno Inmortal, pero mucho peor que la Primera Generación. Parece que no saben muy bien qué hacer con la franquicia, lo mejor sería que se dejaran de comer la cabeza y pongan a los personajes a vivir aventuras, que es lo suyo, sin darle más vueltas.

sábado, 29 de noviembre de 2014

Podemos: ¿Izquierda Kitsch?

Mi primer recuerdo de Pablo Iglesias en la tele fue en El Gato al Agua, donde solían llevar uno o dos tertulianos de izquierdas, aparentemente para hacer de "sparrings" de los habituales de derechas. Pablo Iglesias me parecía un hombre menudo y tímido, más apropiado para fundar un grupo de lectura en alguna casa ocupa que un partido político (como se ve, tengo una gran intuición para la gente).

Curiosamente, aquel programa no sólo sirvió para la promoción de cara al "gran público" de políticos como el propio Pablo Iglesias y Antonio Carmona, también han sido varios los tertulianos que aprovecharon el tirón para fundar partidos Políticos: de nuevo Pablo Iglesias, pero también Mario Conde y Miguel Durán, de cuyos proyectos el único que parece perdurar es el de Pablo Iglesias, pero creo que interesa dejar claro que el suyo es un intento más entre muchos de aprovechar el hueco que iban dejando los partidos mayoritarios.

El caso es que nuestro tímido tertuliano evitó prudentemente "romper la cara" a sus compañeros de tertulia, y fundó un partido político: Podemos, tomando el viejo eslogan del progresismo americano, consagrado finalmente por Obama (Yes, we can).

Así nace Podemos, con una sencilla idea: el cabreo con el sistema bancario y empresarial, y un nebuloso odio hacia todo lo que se considere parte del mismo, sobre todo la otra casta.

Aquí conviene hacer una digresión, porque la existencia de una clase político-empresarial es difícil de negar, por mucho que los propios miembros se hagan los ofendidos. La prensa está repletas de noticias que nos muestras las alianzas entre miembros de la clase dirigente, aliados para dirigir las rentas comunes a sus bolsillos. La casta existe, se le ponga el nombre que se quiera, si bien es más que discutible que deba ser sustituida por otra nueva casta (se le ponga también el nombre que se quiera) de seres puros que han venido de las esferas celestes para mostrarnos, de nuevo, el camino al paraíso comunista. Ni siquiera eso, sino al paraíso comunista B, de segunda mano, feo y degradado, un paraíso Kitsch.

¿Qué es Podemos? La velocidad a la que ha crecido este partido-movimiento hace que sea difícil de definir, porque ha ido tomando forma durante el año en el que ha existido. Parece claro que de un movimiento popular compuesto de círculos de discusión y acción ha pasado a ser un partido según los esquemas habituales, pero por el camino ha dejado muchas cosas, y ha ido cogiendo otras.

Como "bautismo de fuego" se presentó a las elecciones europeas con un logo que era el retrato de su líder ¡Y triunfó! Lo cual nos da la medida de lo peligrosa que se vuelve la política cuando millones de ciudadanos se desesperan al no ver salida a su situación de pobreza, y deciden que no quieren un sistema que no les quiere a ellos.

El caso es que meses después de obtener muy buenos resultados en las elecciones europeas, Podemos se reúne para convertirse en partido ¡Y para hacer un programa! No es que quiera abusar de los signos de exclamación, pero: ¡Ahí está la clave!, ahora es cuando Podemos ha hecho un programa, entonces ¿Se puede negar que antes era sólo cabreo y desesperación?

La confección en este momento de dicho programa es una contradicción en sí misma, porque ¿Qué eran antes sino tenían un programa? Parece que un partido se forma para intentar sacar adelante unas ideas, pero no es el caso de Podemos, ellos tenían una marca, y ahora la tratan de llenarla de contenidos según quiera "el pueblo". Es hora de que el departamento de marketing pase a segundo plano, y empezar a producir.

Un partido debe ser un libro de ideas y proyectos, que se ofrece al público con intención de convencerlo y liderarlo, no un cuaderno en blanco para que el público escriba lo que quiere, porque eso es una marca, que se va construyendo según los estudios de mercado van indicando la preferencia de los consumidores.

Esta contradicción general se manifiesta en un montón de contradicciones particulares, muchas de ellas afectan a la figura de Pablo Iglesias, pero se ha puesto en entredicho todo el movimiento, al dejar claro que era un edificio sin cimientos, una fachada, un decorado.

Me queda de la duda de qué significará esto en un futuro. Tengo para mí que un triunfo importante de Podemos en unas elecciones generales nos descubriría que finalmente siguen siendo ellos mismos, y se han disfrazado de ovejas simplemente para pasar "el mal trago" de las elecciones. Una vez en el poder, viendo que sus medidas nos llevan todavía más a la pobreza, no tendrían otro remedio que "huir hacia delante", controlar los medios, buscar enemigos en todas partes... en fin, algo muy conocido y que se puede resumir en romper caras y hacer cacerías de fachas.


viernes, 28 de noviembre de 2014

El Debate de la Corrupción

Ayer se debatieron en el congreso las propuestas del Partido Popular para luchar contra la corrupción, en uno de esos días en los que mejor se hubieran quedado todos en casa.

No han tenido mucha importancia las propuestas en sí mismas, porque en este caso la oposición ha preferido sacar los dientes para dar un mordisco electoral, en lugar de diseñar entre todos un plan común, que falta nos hace.

Pedro Sánchez, que se columpia demasiado a menudo, en esta ocasión parte de negar la legitimidad al presidente del gobierno, que evidentemente saca su legitimidad del mismo sitio que Pedro Sánchez, de los votos, y en la misma línea hablan los partidos minoritarios, destacando Rosa Díez, que sacó a relucir lo peor de sí, esa vena de política profesional que le sale a veces.

Desde mi punto de vista han olvidado su deber, y han perdido todos el debate, incluido el gobierno, cada uno por sus motivos ¿Entonces quién ha ganado? Pues la corrupción y Podemos.


sábado, 22 de noviembre de 2014

Cultura y Semiótica - 2009 - Umberto Eco

Pequeño volumen, que se puede leer perfectamente en lo que dura una tarde, que recoge dos conferencias de Umberto Eco: "Semiótica y cultura" y "Los límites de la interpretación".

La primera de ellas me parece una conferencia de antropología, en la que se han sustituido conceptos como "cultura" o "cultura circunscrita" por metáforas: "Enciclopedia media", "enciclopedia máxima", etc. El mismo autor parece entenderlo así, al menos en parte cuando dice: "...se debatía [...] si toda la cultura se debería estudiar como un fenómeno semiótico o si todos los aspectos de la cultura podrían estudiarse como una actividad semiótica". Esto es acaso muy parecido a decir que ni la semiótica es parte de la antropología, ni la antropología parte de la semiótica, sino que ambas son la misma cosa.

De la misma manera, como decíamos, la "Enciclopedia media", "Enciclopedia especializada" y "Enciclopedia máxima", entendiendo enciclopedia como conocimientos interrelacionados, no sólo definidos o clasificados, son entendibles como cultura en su sentido antropológico: "todo aquello que sabemos por el hecho de vivir en sociedad", y culturas circunscritas de ámbito nacional, local, gremial, etc.

Parece que la semiótica es un punto de vista dentro de la antropología, y quizás por eso da la impresión de traducir nociones habituales a un nuevo lenguaje.

La segunda conferencia: "Los límites de la interpretación", es para mí más interesante, sobre todo porque se desarrolla en parte sobre la historia de las obras del autor, sus lectores y sus críticas.

En una primera parte Eco nos dice que el texto se puede interpretar de muchas maneras, pero no "de cualquier manera", y en una segunda hace un seguimiento de la evolución que han seguido sus novelas una vez publicadas, en relación a distintos lectores.

Resulta que cuando escribimos el texto dice cosas que nosotros no estábamos diciendo, y por ese motivo algunos lectores encontraron en las novelas de Eco relaciones que el autor no había tenido intención de incluir, pero que tiene que admitir como reales, como legítimas o irrefutables.

También hay otras lecturas que no son legítimas, debido a que incluyen aportaciones extemporáneas de los lectores, o a que son lecturas parciales, deformaciones del texto por la memoria, etc.

¿Cómo encontrar un buen camino en este bosque de interpretaciones y reconstrucciones? Con la brújula que es el propio texto.

El párrafo final de la conferencia nos resume perfectamente el núcleo de la idea: "Entre la misteriosa historia de la producción de un texto y la deriva incontrolable de sus interpretaciones futuras, el texto, en cuanto texto representa todavía una presencia confortable, un paradigma al que atenerse".

O sea que cuando digo digo, a lo mejor digo Diego, pero lo seguro es que digo digo.


martes, 18 de noviembre de 2014

Robocop - 2014 - José Padilha

Nueva versión de la película de 1987, en la que se ha renovado la imagen, y hasta cierto punto la historia, aunque mantiene el interés por averiguar donde está el límite de lo humano, o al menos por darnos su versión. El autor, de nuevo, apuesta por el ser humano como algo cercano a lo espiritual, que es más mente que cerebro, entendido como sistema informático de gestión de la información.

El personaje clave para mí es, más que el metálico protagonista, el creador del engendro, el doctor Norton, bien interpretado por Gary Oldman, especialista en prótesis de última generación, que es capaz de unir el cerebro a un torso cibernético. En él se resuelve toda una serie de discusiones sobre el dinero, el prestigio, lo animal y lo humano, mientras va cayendo sin apenas darse cuenta desde sus ideales de ética médica a la dura práctica de la fabricación industrial con carne humana como materia prima. Dice de él Robocop que "...es un buen tipo", pero hasta los buenos tipos tienen su punto débil, y se pueden hacer malvados si se les aprieta.

De esta manera van modificando un ser humano con prótesis hasta convertirlo en en "una máquina que se cree Murphy", mutilando las zonas cerebrales que le permiten dudar o emocionarse, hasta que el cerebro pasa a ser un simple intermediario entre el programa informático y la prótesis, sin decisiones que tomar.

"Es una imitación del libre albedrío" dice, más o menos, el buen doctor, pero ¿No es así siempre, o al menos casi siempre? Quien verdaderamente lucha en la película por desrobotizarse es el propio científico, a quien continuamente le están recordando lo que ha hecho, porque lo cierto es que él no es consciente, traiciona y destruye a Murphy de manera automática, seguramente él diría en un juicio que no era completamente consciente, o sea, que era una imitación del libre albedrío.

También el frío hombre de negocios que costea la fabricación de Robocop, en un papel bien representado por Michael Keaton, es un robot, y sus empleados de marketing; por supuesto su mercenario y su comercial en televisión. En realidad pocos se salvan, entre los personajes principales sólo Murphy dentro de su prótesis y el doctor en su revelación moral nos aparecen como seres humanos libres, porque ocupan una zona intermedia, han visto el otro lado y han podido retroceder.

He leído críticas que han tratado bastante mal la película, porque es cierto que a veces se vuelve banal, pero ¡Es una película de acción! Algunos echan de menos el aspecto negro y cierto humor de la primera versión. Por mi parte creo que es cierto que esta película ni es negra ni tiene humor, pero también creo que esos defectos pueden verse como virtudes si nos damos cuenta de que no se pretende calcar la original, lo que nos intentan contar es otra cosa y hasta cierto punto necesita de otro lenguaje.

domingo, 16 de noviembre de 2014

El Gran Hotel Budapest - 2014 - Wes Anderson


Es una comedia divertida, cuidadosamente realizada, y con un guión que parece recorrer la historia del cine, tocando todos los géneros y situaciones dramáticas. Durante toda la película tiene uno la sensación de que le están contando un chiste al espectador, que todo el ambiente hace pensar que hay una gran ironía escondida, que no acaba de surgir. Creo que la clave está en darle enorme importancia las trivialidades, y frivolizar sobre lo importante, como sistema y también en la nostalgia de un tiempo que nunca existió en un país inventado.

El personaje principal, que lleva toda la ironía en sí mismo, es el de Ralph Fiennes, conserje del hotel, un hombre refinado de modales y sentimientos, que al tiempo podría considerarse un depravado, y que sale por los pelos de las situaciones más difíciles sin tener que adaptarse a ellas, haciendo de alguna manera que ellas se adapten a él.

Transcurre en una Europa del Este inventada, durante los años de entreguerras, pero un tanto avejentados, de manera que parece situado en los años treinta con ambiente de los veinte, la transición nostálgica entre un mundo considerado antiguo y mejor, de modales corteses y tiempo para decir las cosas y fijarse en los detalles, y el mundo de prisas que se nos viene encima.

Todo ello está contado desde la perspectiva de unos igualmente falsos años 80, falsos porque se sitúan en una isla, el hotel Budapest, que por voluntad de su dueño se ha mantenido "igual" a como estaba en sus año de explendor. "Igual" significa que no se ha modernizado, y que ha permanecido abierto, no que no haya envejecido. En estos años el dueño del hotel, ya anciano, le cuenta como llego a ser su propietario, cuando era más joven, a un escritor, que es quien nos cuenta la historia a nosotros.

Todavía tenemos otras dos épocas, el autor, años más tarde, escribe esta historia, en un despacho también fuera del tiempo, a su manera, con un nieto que le acompaña y le toca un poco las narices. Por último, una chica lee el libro frente al busto del autor, que suponemos ya fallecido.

Las imágenes y la manera de tratar las escenas lo mismo nos recuerdan a la película de Tintín que a las españolas de Mortadelo y Filemón. Se mezclan composiciones "preciosistas" con otras "feístas", sin dejar mucho espacio intermedio. Los efectos especiales tienen un aspecto artificial que parece hecho a propósito, como parte del ambiente general de fábula, como corresponde a una historia fuera del tiempo en un país inventado.

sábado, 15 de noviembre de 2014

Cimbelino - 1983 - BBC Shakespeare Collection


Este drama de Shakespeare nos cuenta la historia de Cimbelino, o Cymbeline, o Cunobelinus, rey de los bretones en tiempos de Augusto, nieto de Cassivellaunus, el jefe que pide ayuda a Asterix, en "Asterix en Bretaña", que, como es de suponer está tan basado en hechos reales como la propia historia de Shakespeare.

Así, como hemos dicho en otras ocasiones que Shakespeare apoya sus obras "situada" en la antigüedad romana en las "Vidas" de Plutarco, las que transcurren en la antigua Inglaterra lo hacen, al menos en parte, en las llamadas "Crónicas de Holinshed", y éste es el caso también de Cimbelino.

La obra tiene al menos dos lecturas interesantes.

Una referida a la literatura, es muy oportuna para el análisis de la comedia, el drama y la tragedia, en unión a las obras cómicas de las que ya hemos hablado, como: "Bien está lo que bien acaba", y a las trágicas como: "La tragedia de Coriolano" o "Romeo y Julieta". Si Woody Allen intentó un análisis sobre la marcha de la comedia y la tragedia en "Melinda y Melinda", el mismo análisis se puede hacer a través de las obras de Shakespeare.

La estructura de este drama y el de una comedia es prácticamente la misma, con engaños similares, amores, y los mismos equívocos, la diferencia es sólo el tono en el que hablan los personajes, y la intensidad el peligro, porque también en las comedias los personajes temen por su vida, pero de otra manera. Se puede decir que el drama es un intermedio entre la comedia y la tragedia, porque tiene componentes de ambos géneros, es algo así como una tragedia con final feliz, o una comedia con pretensiones. La tragedia por su parte tiene como componente fundamental la muerte y la violencia, que la recorren del principio al final.

La otra lectura de la obra, es la del personaje de Cimbelino, que no tiene "más minutos" que su hija Imogena (Imogen), pero es quizás un personaje más sencillo, además de ser el rey, y, al estilo de las tragedias, es prácticamente un arquetipo, representando el orgullo como rey frente a la humildad en lo doméstico. Cimbelino es un monarca absoluto, pero es su mujer, que además es la madrastra de Imongena, quien le dirige en sus actos de gobierno, y en sus decisiones personales. Como se ve Blancanieves no es una obra original del todo, y los arquetipos funcionan.

Finalmente, de una forma un tanto apresurada, al estilo de las comedias, pero también al de su época, se resuelve la historia, aclarándose todos los equívocos, y ocupando cada uno su lugar. Se termina porque sí la guerra entre los bretones y los romanos, los que se quieren seguirán juntos para siempre, los malos todos muertos, y los buenos obtienen su recompensa ¡Cómo la vida misma!

domingo, 9 de noviembre de 2014

Don Jon - 2013 - Joseph Gordon Levitt

Película escrita, protagonizada y dirigida por Joseph Gordon Levitt, que se va abriendo un hueco en la industria, pero de alguna manera sigue pareciendo una eterna promesa sin cumplir, porque nunca da con ese papel clave que le convierta en una estrella. Hace poco hablábamos de una gran película en la que hace de protagonista: Looper, también es el último Robin de Batman, etc.

En este caso representa un chico de gimnasio, italoamericano, que se dedica a salir con los amigos y ligar con chicas muy guapas, en medio de una sucesión interminable de tópicos, de la que sólo escapa su afición principal: ver porno.

Parece que intenta aprovechar un cierto efecto sorpresa en la narración, planteándolo como una comedia romántica de un tono distinto (al estilo de "Con derecho a roce"), pero rompiendo esta trama a mitad de película. Este efecto de la novedad se pierde un poco en una conclusión diluída, en la que se sustituye una relación en principio idílica pero finalmente falsa, por seguir siendo un adolescente de treintaitantos, teniendo la "suerte" de que sus amigos están tan paralizados en la vida como él, de manera que puede seguir entretenido con ellos, yendo a discotecas y viendo deportes por televisión.

El protagonista es además católico, y esto se aprovecha para un estúpido gag de confesiones, con el que lo único que consigue sumar unos cuantos tópicos a los previamente descritos.

En definitiva, es entretenida, pero saca aprobados raspados o suspende por los pelos en casi todo. Intenta ser graciosa pero apenas se ríe uno; intenta escandalizar, pero no lo consigue, salvo que uno sea un monje o una religiosa de clausura, lo que acaba pasando es que las escenas de "ejemplo" de porno queden algo artificiales en el ambiente de comedia romántica; intenta romper con el género, pero no tiene nada que ofrecer a cambio, asi todo resulta un poco "quiero y no puedo".

Maneja un lenguaje que está construido para la comedia romántica, y que no funciona para esto que ha hecho, se le ponga la etiqueta que se le ponga.

El papel de Scarlett Johansson resulta un poco contradictorio, porque parece una choni, cuando el papel es de "chica bien", por otra parte Julianne Moore, que es la otra coprotagonista lo hace bien, como siempre, pero le han dado un papel que va sobrado de intensidad en una película por lo demas muy ligera, y parece siempre un poco fuera de lugar.

jueves, 6 de noviembre de 2014

MAUS - 1980 a 1991 - Art Spiegelman

Famoso comic sobre el holocausto, ganador del premio Pulitzer en 1992, cuya primera entrega, titulada: "Mi padre sangra historia" se publicó en 1986 y la segunda: "Y aquí empezaron mis problemas" en 1991.

Nos cuenta por una parte la historia de un empresario polaco de raza judía durante el nazismo, y por otra la vejez del mismo individuo y la relación que mantiene con su hijo, que es el autor del comic.

Como original recurso narrativo cada nacionalidad o raza viene representada por un animal, así, los judios son ratones; los polacos, cerdos; los alemanes, gatos; los suecos, alces; los estadounidenses, perros; los franceses, ranas; y los ingleses, peces. Esta es la lista completa, lo cual es una profunda ironía, porque esta misma representación no es sino una lista de prejuicios raciales, o, como poco, una simplificación igualmente racista.

En un momento dado el autor habla de sus dudas sobre lo que ha escrito, y sólo entonces pasa a ser un ser humano con una máscara simulando ser un ratón, mostrando que la raza no es tan esencial, sino algo también sobrepuesto al hecho de ser humano, aunque ningún ser humano aparece dibujado sin máscara (sí se ven algunas fotos).

Es un relato sin piedad hacia el protagonista en su vejez: se le trata de avaro, irascible, intratable; en definitiva alguien insoportable con quien es imposible tener una relación normal, pero a quien a la vez es imposible no admirar, porque no ha sobrevivido por casualidad, son sus habilidades, y hasta cierto punto sus defectos, las que le han permitido llegar a viejo mientras la mayor parte de sus seres queridos morían a su alrededor.

El dibujante (el personaje del dibujante, al menos) es una persona independiente, pero caprichoso y a veces estúpido, parasitando lo último que puede darle su padre, mientras lo trata con una lejanía debida al rencor generacional propia de un inmaduro que considera a su padre responsable de sus limitaciones y problemas.

La narración tiene el peso del holocausto, pero el acierto de la historia es contarlo como la biografía que es, haciendo pocas referencias a la situación general o la guerra, salvo cuando pasan por la vida del protagonista, presentando los hechos tan asépticamente como es posible. Por supuesto ser del todo aséptico tratándose de algo tan sucio, es algo que ni se puede ni se debe conseguir.

También es importante la parte en la que se nos plantean las consecuencias del trauma, y los personajes se preguntan varias veces hasta qué punto el carácter de cada uno se ha formado en base al holocausto, que ha sufrido el padre, pero también ha heredado el hijo, de alguna manera. Lo cierto es que la relación del padre y el hijo es parecida a muchas otras en las que se mantiene a lo largo de la vida el conflicto generacional.

Desde luego merece la pena su lectura, aunque sea un tema tan repetido, y sobre el que se han hecho tantas obras de calidad en todos los formatos. El punto de vista animal tiende a convertirlo en una fábula, que nos oculta hasta cierto punto las imágenes más horribles para dejarnos a solas con lo que no tiene imagen, con las palabras a la vez sentimentales y reflexivas.


El Amanecer del Planeta de los Simios - 2014 - Matt Reeves


Secuela de la precuela de El Planeta de los Simios, que sin embargo está muy por encima tanto de la película de Tim Burton (quizás sea más difícil compararla con la original), como de El Origen del Planeta de los Simios.

Los simios de diversas especies que en la primera parte huyeron al parque de los alrededores de San Francisco se han convertido en una sociedad al estilo de las tribus prehistóricas, de manera que, seguro que no por casualidad, las primeras escenas parecen sacadas esos documentales que se hacen ahora sobre los primeros homínidos. Estos monos ya son completamente inteligentes, y para ser nosotros sólo les falta dar un salto tecnológico.

Los efectos especiales están muy bien hechos, y los simios "ligeramente" humanizados son creíbles en su aspecto, lo cual crea una ambigüedad que funciona muy bien, porque son como personillas feuchas y peludas, cuya postura nos sentimos tentados de apoyar.

El relato pretende ser fundamentalmente político, presentando dos frentes: por una parte el pacifismo frente al belicismo, y por otra la exigencia de uniformidad frente a la diferencia existente. Ambos temas se mezclan y reparten mediante la diversidad de personajes, abriendo varias posibilidades de análisis interesantes.

Dentro de este sistema, relativamente sencillo pero muy potente, hay una pregunta que quizás algún día tenga que hacerse la humanidad: ¿Qué debemos hacer ante la aparición de una especie tan inteligente como la nuestra?

La trama está muy bien razonada, sin excusas, y sin que  nada pase porque sí, todo tiene su motivación, algo realmente extraordinario hoy día para una película comercial, ayudando  mucho la presencia de los personajes simio a la hora de darle una apariencia original.

Tiene además un trasfondo trágico, porque el horizonte de la película, y esto no se puede olvidar, es "El Planeta de los Simios", que le añade épica y trascendencia a que de lo contrario sería una lucha entre bandas.

Está bastante por encima de la media del cine de acción actual, por lo bien acabado, por lo bien contado e incluso por lo entretenido y emocionante.

martes, 4 de noviembre de 2014

Yo Fui a EGB - 2013 - Javier Ikaz y Jorge Díaz

Este libro es heredero de un blog  del mismo título, en el que acumulan recuerdos comunes a la generación de quienes eran niños entre los 70 y los 90 del pasado siglo, esto es, la mayor parte de quienes hoy por hoy somos adultos en edad laboral, que además estamos en la edad de la nostalgia, del: "¿Te acuerdas cuando...?"

Las tapas del libro, en mi edición, vienen con una cinta que reza: "El libro más vendido del año", "14ª Edición", lo cual basta para que nos demos cuenta del enorme éxito de este proyecto, que además despierta mucha simpatía entre quienes fuimos a EGB, por lo mismo que decía antes, somos muy agradecidos a todo lo que nos despierte el recuerdo y la nostalgia amable.

Digo "nostalgia amable" porque fundamentalmente es una recopilación de las cosas que nos gustaban cuando éramos niños, tanto en la tele, como en la tienda de golosinas, etc. Y esto es otro gran acierto por parte de los autores, este abrazar lo "Pop", la cultura popular destilada y purificada.

Es algo parecido a lo que intentaba Umberto Eco en "La misteriosa llama de la reina Loana", sólo que a los autores de este libro les queda mucho más entretenido y alegre.

Por lo demás no es un libro al uso, tiene mucho de blog pasado a papel en la brevedad de los textos y en la importancia de las fotografías. Las claves son el acierto en la selección de temas, y las fotos, que despiertan inmediatamente recuerdos personales al lector, trayéndonos objetos antes comunes que parecían olvidados, pero están por ahí en algún rincón de la memoria. Los textos son un mero acompañamiento, comentarios sobre las fotos, buscando siempre la complicidad del lector, pero de alguna manera repetitivos y bastante mejorables, supongo que tendrán mucho éxito entre los lectores habituales del Blog, pero no creo que funcionen tan bien para quienes no lo siguen, como es mi caso.

En general es un libro agradable, que se lee (o mira) en un rato, y para mí ha incluido un hallazgo: la foto de una entrada para un concierto en el que yo estuve siendo casi un niño; se la he enviado a uno de mis hermanos que estuvo allí conmigo, y recordar como nos quedamos esperando a los músicos de La Frontera, que además nos firmaron un autógrafo... A mí este libro me lo han regalado, pero reconozco que sólo ese momento hubiera bastado para que mereciera la pena comprarlo.




lunes, 3 de noviembre de 2014

Lo que nos deja la Crisis

Pase lo que pase en los próximos años, mejore o no la economía, parece claro que nos encontramos en una nueva situación, porque algunos de los cambios a peor que nos ha traído la crisis han venido para quedarse.

En el plano social, junto al problema del enorme número de parados todavía existente, se ha producido una enorme bajada de ingresos de los trabajadores, que hace pensar que ahora sí vivimos por encima de nuestras posibilidades, y que precios como el de la vivienda tendrán que seguir bajando, porque un piso de 200.000 euros ya no tiene sentido para tantos ciudadanos que acabarán cobrando entre 600 y 1000 euros al mes. Éste sigue siendo el ejemplo mas evidente de que todavía nos queda mucha "digestión" por hacer, incluso en el caso de que las cosas vayan a mejor, pero, en general, la esperanza que algunos mantienen de que las cosas "vuelvan a ser como antes", nos lleva a vivir sumergidos en cierto espejismo del que iremos saliendo con dolor, según vayamos gastando nuestros ahorros y los de nuestros padres y nos quedemos viviendo más "al día".

¿Nos explicarán algún día cuales serán las repercusiones reales de las bajadas de sueldo? Pongamos que podemos llegar a un 15% o incluso un 10% de paro en los próximos años, aún así las bajadas de sueldo implican bajadas de cotizaciones y de IRPF, los impuestos para las empresas también se bajan, para estimular la economía, los más ricos cada vez tienen más recursos para pagar menos, incluso dentro de la ley, si hace falta se irán fuera a climas más "cálidos" y asunto resuelto, entonces ¿Quién pagará las facturas?

Una escena representativa: el otro día estaba yo dando un paseo, ya había anochecido, pero no era más allá de las ocho
de la tarde, el ambiente era tranquilo, todavía hacía buen tiempo y no faltaba gente en las terrazas, pero en el trayecto de vuelta a mi casa me crucé con tres personas revolviendo en distintos contenedores de basura, los tres eran hombres, probablemente entre 65 y 75 años, dos de ellos se pusieron a disimular al ver que alguien pasaba por su lado, y el tercero estaba tan concentrado, o le importaba tan poco, que siguió con lo suyo sin más.
Incluso suponiendo una mejoría en la economía nacional ¿Vivirán estas personas lo suficiente como para ver normalizada la suya, su economía personal y familiar?

Otra de las herencias de la crisis, que también dejará su huella pase lo que pase, es el intento nacionalista de dar por terminadas sus reivindicaciones por el camino de conseguir la independencia. Intentan abandonar el barco por si se hunde, en la idea de que ellos nadan mucho mejor que los demás (basta escuchar a Junqueras), pero en realidad el único hecho cierto es que prefieren nadar solos.

Aún en el caso de que salgamos de la crisis, los independentistas han puesto un hito en el camino, que difícilmente se moverá sino se produce un movimiento hacia la unidad de España, que clausure las cortes autonómicas, para convertir España en un Estado provincial. Esto no significa centralizar, o al menos no en el sentido de que no se tomen decisiones por representantes locales, sino que dichos representantes deban tomar dichas decisiones negociando y coordinándose con el resto, no cada uno por su lado, produciendo sinergias sin enfrentarse en "carreras hacia el fondo", como dice la expresión anglosajona (race to the bottom), carreras que sólo consiguen hacer más pobres a cada uno de los participantes.

En previsión de aquellos a quienes consideran la idea de la unidad como idea de derechas, llamaré en mi defensa a Noam Chomsky, quien, en contra de repartir competencias, arguye que sólo las grandes empresas pueden sobornar a los gobernantes de los USA, pero incluso las medianas pueden influir en el gobierno de un estado concreto.

Hay una tercera herencia que nos dejará la crisis, aunque se solucione, y es la caída de los grandes partidos y el surgimiento de otros nuevos, pero este es un tema que merece la pena tratar en solitario en otra ocasión.

domingo, 2 de noviembre de 2014

Looper - 2012 - Rian Johnson

Decía el filósofo Erich Fromm que a partir de los principios del siglo XX se acabaron las utopias y las narraciones sobre el futuro pasaron a ser pesimistas, lo que llamamos distopías.

Parece que esta es una clave, sino "la clave" de la postmodernidad, la incapacidad de prever un futuro a medio plazo en el que todo vaya bien para todos, la falta de fe en un sistema. Incluso la recuperación del discurso comunista que se da en estos tiempos carece de narrativa, es más bien un llamamiento individual a conseguir una vida mejor para uno mismo, no un proyecto para todos. La nueva lucha de clases de momento no se propone acabar con las clases.

En este sentido la película transcurre en dos tiempos futuros, el imperfecto de dentro de treinta años, en una ciudad que todavía conserva mucho de las actuales, pero más pobre, y el futuro perfecto, acabado, de dentro de setenta años, que es el alcance de la historia que se cuenta. Es, por decirlo así, el futuro de la generación que naciera en el 2012.

A veces parece que se trató de hacer una versión intimista de Terminator, vínculo que no intentan ocultar, ya que hay un personaje llamado Sarah, que es Sarah Connor, claramente. En esta ocasión no es un robot sino un hombre quien viene del futuro para corregirlo desde el pasado.

Como decía, esta película es más intimista, y nos muestra las posibilidades de cada individuo, según sean sus decisiones, las circunstancias y el bagaje que vaya acumulando, si bien, como se demuestra finalmente, las propias decisiones son lo definitivo, y podría ser la conclusión, somos radicalmente libres. Nuestras posibilidades se mueven de lo peor a lo mejor, y podemos acabar haciendo el papel de Terminator o de John Connor.

El ambiente de moderna decadencia y la presencia de Bruce Willis nos lleva a tener en cuenta también 12 monos, con la cual se encuentran también otros puntos en común. Pero el hecho de que haya multitud de referencias a otros viajes en el tiempo, incluidos también los de Futurama, no significa que sea un refrito al estilo de las películas comerciales, es algo distinto, simplemente se incorpora a la tradición de la mejor ciencia ficción. La combinación de las piezas, aunque no sean, ni puedan ser, del todo originales, y los sutiles pero continuos cambios de perspectiva en la narración, hacen de esta película algo nuevo, y desde mi punto de vista algo muy bueno.

El único defecto, desde mi punto de vista, es que el entramado de pasados y futuros posibles, es demasiado complejo, y las líneas de tiempo se hacen confusas, aunque, como dice el personaje de Bruce Willis hablando del tema: "¡Eso no importa!, nos podríamos pasar el día hablando de las complicaciones de los viajes en el tiempo", con una ironía que intenta a la vez dar una explicación y dar el tema por cerrado. Para mí, de todos modos, demuestra que se han puesto en el lugar del espectador.

¡Merece la pena! A poco que el lector sea aficionado al buen cine, y en concreto a la ciencia ficción, verá que esta película es un imprescindible, tanto como las ya citadas Terminator o 12 Monos. Soprende lo poco que se ha oído hablar de ella, pero seguro que se irá filtrando a través de obras futuras del género.

sábado, 1 de noviembre de 2014

Retórica - S. IV A.C. - Aristóteles

En general la obra de Aristóteles siempre es útil para comprender nuestro tiempo. Su simplicidad de análisis, el hecho de describir las estructuras mediante ejemplos realmente existentes, y lo poco que ha cambiado el habitante de occidente, pese a los cambios producidos en el ambiente, le da una vigencia extraordinaria.

En este caso, hablando de la retórica, hace una doble división del tema: por una parte distingue entre discurso forense, deliberativo, y de exhibición, esto es, los judiciales, políticos y, digamos, artísticos; por otra distingue entre emisor, receptor y mensaje. Con las combinaciones de estas piezas va construyendo su edificio.

La retórica se describe en paralelo a la analítica, pero si ésta se ocupa de la verdad, aquella es menos ambiciosa y busca lo convincente. Así, los métodos del análisis que son la deducción y la inducción, tienen su correlato en los métodos de la retórica en forma de entimema y el ejemplo, pero ni uno ni otro pretenden demostrar, sino sólo aumentar la plausibilidad de la postura que se defiende en el debate.

Como es tradicional, los filósofos no tienen mucha confianza en sus oyentes, por lo que para la retórica se exige hablar con sencillez, y no sólo eso, también
...basar los argumentos y razonamientos en nociones comunes
No sólo para que la gente lo entienda, también, y esta es una de las claves del poco rigor de la retórica, para que se sientan cómodos y se identifiquen con lo que están escuchando. También es importante la apariencia del hablante, porque debe parecer moderado e inspirar confianza, todo ello, como se ve, poco relacionado con la verdad. El autor parece pensar que el fin justifica los medios, y que lo importante es defender una buena idea, no los medios que uno utilice para ello:
... lo sofístico no tiene que ver con el dominio de unos recursos, sino con el propósito o, lo que es lo mismo: se es sofista si se pone el arte del razonamiento al servicio de una interpretación moral desviada.
Lo cual parece hasta cierto punto una excusa, y se enfrenta con Platón, tanto respecto a los sofistas como respecto a la retórica en sí misma.

Como no hay nada aislado en este mundo, Aristóteles tiene que repasar su Política, Analítica, Poética y Ética para hablarnos de retórica, tanto para analizarla, como para explicar los temas de los que se habla, porque esto es también fundamental: si uno defiende a un acusado, tiene que saber de leyes y costumbres; si habla de lo que debe hacer la ciudad, tiene que saber de guerra y abastecimiento, etc. De esta manera la retórica resulta una buena manera de resumir el pensamiento del filósofo sobre muchos temas. Por ejemplo, la política:
El fin de la democracia es la libertad; el de la oligarquía la riqueza; el de la aristocracia, la disciplina y la legalidad; el de la tiranía, la custodia...
Hay que recordar que Aristóteles, presentado a veces, como en esta edición, como partidario de la aristocracia, más bien propone un sistema que equilibre entre todos los sistemas, en realidad algo que podría ser parecido a nuestra democracia representativa actual, que, siendo democracia, tiene componentes aristocráticos en cuanto a que los representantes se eligen (en teoría se eligen los mejores) y componentes monárquicos, no sólo por el Rey, sino porque en todas las democracias hay un jefe de gobierno que destaca sobre sus compañeros.

También, como decía, la Ética, como en este utilísimo ejemplo:
...cuando quieras elogiar, mira que consejo podrías dar, y cuando quieras aconsejar, mira qué podrías elogiar.

Todo el libro está cuajado de citas, sobre todo de Homero, cuya obra era de referencia para todos los temas, aunque también encontramos fragmentos de tragedias, algo de Simónides, etc. Todas ellas de obras conocidas en su tiempo, quizás para cumplir su propio consejo de utilizar nociones comunes.
Por eso tiene razón el poeta, refiriéndose a Héctor, cuando quiere calmar la cólera de Aquiles ante su cadaver: "es tierra insensible lo que ultraja, enfurecido."

En definitiva, para no alargarme demasiado, siempre merece la pena Aristóteles. Casi veinticinco siglos de distancia hacen que lo que permanece actual de sus ideas nos ayude a ver un poco desde fuera tanto la sociedad en la que vivimos como a nosotros mismos. Es difícil evitar, al leer está retórica, el analizar como nuestros políticos y opinadores profesionales utilizan todavía los mismos recursos que se utilizaban hace tanto tiempo para discutir si convenía entrar bajo la protección de Filipo o permanecer independientes, así como otros asuntos mucho más bajos, claro.

jueves, 30 de octubre de 2014

Drácula, la Leyenda Jamás Contada - 2014 - Gary Shore

Otra película de superhéroes... poco importa que hayan cogido prestado el nombre de Drácula, y el de Mina, porque aparte de esta deuda, nada más tiene en común con la novela de Stoker o su protagonista.

El guión está lleno de lagunas, y en concreto el manejo de los tiempos es ridículo en casi todo el metraje, debido a la absurda obligación que ellos mismos se han impuesto de hacer que el grueso de la acción transcurra en tres días. De la misma manera, sorprende como los poderes del protagonista crecen y decrecen según conveniencia de la escena en marcha, sin un mínimo de coherencia.
Es un producto más de estos que se están haciendo tan habituales, en los que el impacto visual y cierto expresionismo en la presentación de los personajes intentan, más que contar una historia, mantener la suficiente tensión en el espectador, tensión que no depende ya de cercanía a los personajes, ni interés por lo que se está viendo, sino de pulsar a cada momento la sensibilidad del espectador con toda la artillería disponible de música, efectos especiales, etc., como si pusieran cien anuncios estilo Coca-Cola uno detrás de otro.

Un pasatiempo como cualquier otro para chuparle la sangre a la tarde.

Como comentarios al margen que ya no tiene que ver con la película, primero decir que alegra mucho disfrutar un año más de la fiesta del cine, que llena completamente la sala. Lo segundo, ayer fui a una sala Yelmo, que tiene instalado un dispositivo para que las butacas vibren en los momentos de tensión: ¡Quiten eso, por favor!

miércoles, 29 de octubre de 2014

The Amazing Spiderman 2: el Poder de Electro - 2014 - Marc Webb

Un poco larga esta hasta ahora última película de esta saga de The Amazing Spiderman, lo que hace que parezca algo lenta en algunos momentos, aunque en general acaba siendo entretenida.

El otro defecto, desde mi punto de vista, es que la película resulta demasiado polar: en los momentos de acción es más cómica que otras entregas, y Spiderman es un chiquillo que gestiona la tensión contando chistes, pero al pasar a escenas personales es un melodrama desde mi punto de vista exagerado, al estilo hasta cierto punto del Hulk de Ang Lee (o sea, el Hulk de Eric Banna), pero exagerando la gestualidad y el sufrimiento de los personajes, como si se hubiera propuesto hacer un híbrido entre el Avispón Verde y Noviembre de Woody Allen. Esta contradicción se lleva al extremo cuando Spiderman parece estar en un momento dado al borde de la depresión, pasando sin solución de continuidad a enfrentarse casi eufórico a un nuevo enemigo.

En el lado bueno está Emma Thomsom, que cada vez lo hace mejor, y se ve muy cómoda, una explicación que he leído por ahí es que los dos protagonistas son pareja también en la vida real, no sé si ese es el motivo, pero es cierto que funcionan muy bien juntos en la pantalla. También los malos están bien buscados, tanto Harry Osborn como Electro son buenos malos, aunque quizás al papel de este último se le podría haber sacado un poco más de jugo.

La película se va desarrollando en varias tramas, que confluyen en un final inacabable, con desenlace, epílogo, postdata y prólogo de la siguiente entrega, como si hubieran puesto cuatro o cinco finales uno detrás de otro.

Por lo demás, como dije al principio es entretenida, una película más de superhéroes, buena para pasar la tarde en la que no apetezca pensar mucho.

martes, 28 de octubre de 2014

The Comedy of Errors - 1983 - BBC Shakespeare Collection

Curiosamente traducida como "La comedia de las equivocaciones", que a mí al menos me suena un poco raro, quizás fuera un poco más preciso el título "La comedia de los equívocos" o "La comedia de la confusión", que, siendo la misma cosa, para mí tiene ciertas connotaciones más ajustadas a la trama.

Es una comedia de enredo puro, en la que dos parejas de gemelos son separadas en la primera niñez, coincidiendo al cabo de veinticinco años en la ciudad de Éfeso.

Cada pareja está formada por un señor y un sirviente, dado que, cuando nace una de las parejas de gemelos, su padre, Egeón, compra como sirvientes de sus hijos a los otros dos, que también acaban de nacer, evidentemente de una pareja peor situada. Posteriormente se produce la separación en un naufragio, lo cual no forma parte de la obra, sino que es contado por el propio Egeón como introducción a la misma.

Uno de los gemelos hijos de Egeón, junto con su sirviente, llega a Siracusa con su padre, mientras el otro acaba en Éfeso, donde llega a ser un importante señor de la ciudad.

El completo parecido entre los gemelos de cada pareja (y una difícil de explicar igualdad en la ropa que llevan) provoca numerosas confusiones, incluso que todos ellos acaben detenidos acusados de las estafas más diversas. Para introducir tensión a la comedia, como recurso dramático, se introduce una cuenta atrás de veinticuatro horas, que son las que tiene Egeón para reunir el rescate que necesita para salvar su vida, pues ha sido condenado a muerte por romper la prohibición de hacer negocios entre Siracusa y Éfeso.

Los gemelos, pese a ser iguales de aspecto, son muy distintos en sus costumbres, el señor de Éfeso es más serio, más altivo, y golpea continuamente a su criado, mientras que el siracusano es más alegre, y trata a su sirviente como a un compañero de viaje. Por este mismo motivo, el criado bien tratado se comporta con dignidad, mientras que el maltratado se ha embrutecido, permaneciendo siempre agachado, como quien va a recibir un golpe (he añadido una foto de los Dromios, los gemelos sirvientes, que se explica por sí misma). De esta manera Shakespeare también nos da su opinión sobre una pregunta que todavía sigue sobre la mesa: ¿Es la herencia o la crianza la que hace al ser humano?

Como suele suceder en las comedias de enredo de todos los tiempos, y en las obras de suspense, que tienen mucho en común, finalmente se reúnen todos los personajes y se descubre la clave de todos los enredos. En este caso se descubre para los personajes, porque el espectador sabe en cada momento lo que está pasando.

As You Like It - 1978 - BBC Shakespeare Collection

Comedia pastoril, traducida al español "Como Gustéis", en la que se nos cuenta la extraña reunión que tiene lugar en un bosque, al coincidir distintos personajes de la nobleza que han escapado del despótico dominio ejercido por el señor local.

Personalmente me ha resultado un poco aburrida; tanta alegre melancolía y romanticismo algo trasnochado...
El papel de más lucimiento en cuanto a ingenio y gracia, como parece que no podría ser de otra manera, corresponde al bufón, que no hace cabriolas ni es del tipo loco, sino que tiende a ser un filósofo ligero, un tanto cínico y de vuelta de todo, probablemente el personaje más agradable.

Los protagonistas creo que resultarán bastante imposibles, y algo necios, además de su historia inverosímil, aunque el cine ha conseguido hacer obras como "Él es el chico" o "Tutsie", que tienen algunos puntos en común con esta obra, pero sin irse al bosque a colgar poemas de los árboles. Aunque pensándolo dos veces ¿No sigue haciendo lo mismo alguna gente con pintadas y carteles de "Te quiero Piluca", etc.? En la Carretera de Burgos hay en dos puentes sucesivos dos pintadas, en el primer puente pone: "Contigo 365 son como 1" y en el segundo se lee: "Sin ti 1 es como 365", así que igual no está tan trasnochado el colgar poemas de los árboles, hay que darle "una pensada".

Ella es una muy joven Helen Mirren, que lo hace muy bien en el papel de amante Rosalind (en realidad todas estas obras de la BBC están muy bien realizadas y los actores cumplen siempre con holgura), y se disfraza de chico, proponiendo a su enamorado Orlando un extraño trato.

Como decía, el núcleo de la obra es el encuentro de diversos personajes en medio de un bosque, donde se dedican al ocio, con lo cual el autor tiene la oportunidad de comparar distintos arquetipos: el noble, el joven entusiasta, el melancólico, el pastor sabio, el rústico necio, etc. La mayor parte de ellos disfrutan de la sabiduría, cada uno según sus circunstancias, excepto, quizás, el melancólico, que parece ser un cínico simpático a su pesar durante toda la obra, pero finalmente se manifiesta como un auténtico misántropo.

Hay discursos que merecen la pena en la obra ¡Cómo no!, sin embargo no sé si merece la pena tanto lánguido paseo por el bosque para espigar esas perlas de sabiduría, quizás sí, al fin y al cabo es época de setas.

Gangster Squad (Brigada de Élite) - 2013 - Rubén Fleischer

Hay actualmente un tipo de películas, creo que cada vez más en boga, que consiste en crear una buena ambientación, y luego llenarla de escenas que parecen sacadas de otras películas, como si se quisiera hacer una variante seria de las película de Leslie Nielsen. El cine más comercial se va haciendo menos original, y a menudo parece que nos enseñan la misma película habiendo cambiado los actores (a veces tampoco, claro, porque repiten), y mezclando las escenas cada vez en un orden distinto.
Este es cláramente el caso de Ganster Squad, que se basa en la ambientación y en un reparto espectacular de actores de moda: Josh Brolin, Sean Pean, Ryan Goslin y Emma Stone, nada menos, son los protagonistas. Tampoco me queda muy claro porque aceptan este tipo de papeles, supongo que en parte por hacer caja, y en parte porque las películas de gansters les permite ir todo el tiempo vestidos con trajes chulos ¿Puede ser?

Por lo demás, es un calco a lo pobre de "Los intocables de Eliot Ness", sólo que la actual borra todo lo que la otra tiene de honesto, y se basa simplemente en tópicos recogidos aquí y allá, intentando emocionar dando rodeos para intentar sorprender al espectador, a quien supongo que la mayor parte de las veces no le importa mucho lo que está pasando.

Las actuaciones resultan correctas, porque son actores que dan muy bien en pantalla, excepto Ryan Goslin que suele darme la impresión de posar más que de actuar, pero los personajes son tan planos y las cosas que hacen a menudo tan incomprensibles que no consiguen lucirse, sólo hacer que la película resulte tolerable.

domingo, 26 de octubre de 2014

Mil Maneras de Morder el Polvo - 2014 - Seth MacFarlane

Segunda película de Seth MacFarlane, en el que abunda en el humor negro y pretendidamente escandaloso que caracteriza su trabajo.

Creo que en general la obra del director va teniendo un problema, y es que cada vez es más difícil sorprender y escandalizar, y al mismo tiempo hacer gracia, de manera que en muchos chistes de la película ni sorprende, ni escandaliza, ni hace gracia, así pues ¿Por qué llamarlos chistes?
No es que la película no tenga sus momentos, que sí los tiene, pero son minoría respecto a las dos horas de duración, que por otra parte son difíciles de justificar. Quizás haya veinte minutos verdaderamente divertidos, y no más de cuatro o cinco escenas graciosas y logradas, que parezcan más o menos originales (sobre todo si nos olvidamos de Mel Brooks).

En realidad la película se apoya sobre todo en los actores conocidos que participan en ella: Charlize Theron, Liam Neeson, Giovanni Ribisi y Neil Patrick Harris, quienes marcan la diferencia respecto a la torpeza de Seth MacFarlane. Especialmente Charlize Theron, quien se ha convertido en una gran actriz, y parece estar todo el tiempo actuando en registro de comedia romántica, haciendo resaltar la falta de expresividad de su compañero. Él deja claro desde el primer momento que no es actor, y eso se nota demasiado, a lo que hay que sumar el exceso de papel que tiene, ya que, a su personaje hay que añadir los largos monólogos que se ha reservado, que resultan pesados y pedantes en igual medida, pero lo que se dice graciosos, no son graciosos.

Queda claro que no sabía muy bien qué tipo de comedia quería hacer, o cómo encajar la parodia de cine del oeste con su humor absurdo habitual. Desde mi punto de vista acertó al hacer Ted, haciéndonos aceptar desde el principio unos presupuestos absurdos, pero en este caso no encajan las piezas; parecen dos películas yuxtapuestas, y ninguna de las dos muy buenas.

Sin embargo hay tres puntos positivos a destacar: Charlize Theron, Neil Patrick Harris, que está divertido, si bien empieza a parecer una parodia de su personaje en "Como conocí a vuestra madre", y la localización y fotografía de exteriores, que son espectaculares, como se pide a los "Western" modernos.

En definitiva, y después de tanto palo, se deja ver, es una manera de pasar la tarde tan tonta como otras, y al menos se ríe uno de cuando en cuando.

sábado, 25 de octubre de 2014

Antony & Cleopatra - 1981 - BBC Shakespeare Collection

La versión chespiriana de la que probablemente sea la historia de amor más repetida en la literatura y el cine, al menos dentro de las que están "basadas en hechos reales".

Transcurre durante los últimos años de vida de los protagonistas. Cleopatra ya es, desde los tiempos de Julio César, la única reina de Egipto, y Marco Antonio ha pasado de ser uno de los lugartenientes de César a convertirse en uno de los tres triunviros que detentan el poder, en una de las épocas políticamente más tristes, llena de represalias y temor, mientras la república se desvanece en favor de la monarquía imperial.

En esta situación el núcleo de la obra, como no oculta el propio título, no es político, sino el carácter de los personajes y la relación entre ellos. Como de alguna manera ya hablamos al tratar de "All's well when ends well", la mujer es más inteligente, tiene los pies en la tierra, de alguna manera representa la sabiduría, pero es una sabiduría que se ha puesto a sí misma al servicio de un hombre que está por debajo de ella, y se obliga a seguirle en el camino que marcan sus ansias de grandeza, ya fuera de su alcance, porque el gran Octavio surgirá contra él.

Plutarco hace que Antonio haga de pareja con Dionisio Poliorcetes, siendo el vínculo que les une el haber llevado su vida como si fuera una obra de teatro que se va escribiendo sobre la marcha. Sin embargo no le da un gran valor como general, seguramente fue mejor segundo que líder, destacando por su capacidad oratoria, su carisma y su empuje, más que por su talento militar.

En cuanto a Cleopatra, ahora parece ser considerada una mujer muy culta y en general inteligente y capaz, siempre por encima de su hermano, con quien se disputó el trono y también de alguna manera del propio Antonio. Quién sabe lo que hubiera conseguido unida a César y con un heredero común, pero quizás ese tiempo también era ya imposible, lo cierto es que con Marco Antonio poco pudo conseguir.

La representación de la BBC se ambienta, como es costumbre en la colección, con el vestuario de la inglaterra del siglo XVII, aunque por supuesto transcurre en el Egipto del siglo I antes de nuestra era. Se presenta con pompa y seriedad, pero también con algo más de luz y menos solemnidad que otras historias, quizás porque es una historia de política y guerra, pero sobre todo la historia de un romance. La corte de Cleopatra se nos muestra tradicionalmente como alegre, y el continuo me quiere no me quiere de la reina tiene un cierto aire de ironía triste.

La Leyenda del Samurái (47 Ronin) - 2013 - Carl Erik Rinsch

Película que en su momento se llevó un buen batacazo en taquilla, pese a ser probablemente una de las principales apuestas del año para su productora, la Universal. Desde mi punto de vista los intentos de atraer al público asiático nos traerá un futuro lleno de importantes bodrios, algunos de éxito relativo como "Pacific Rim" y otros de fracaso como este 47 Ronin.

Los defectos principales desde mi punto de vista son la incoherencia en la narración y el olor a imitación que desprende cada uno de los fotogramas. Empieza diciendo que te van a contar un hecho fundamental en la historia de Japón, para luego resultar una película de espada y brujería de serie B, en la que la única preocupación de los guionistas parece ser llenar hora y media de película con la mayor cantidad de tópicos posibles. En realidad es peor todavía, porque dura 2 horas.

Al menos desde "Tigre y Dragón" son muchas las películas que con desigual fortuna han intentado seguir el rastro del preciosismo oriental, y asumir su ritmo tan lento y distinto al que estábamos habituados. En este caso intentan lo mismo, pero siempre bastante por debajo de las obras originales, incluso mostrando muros de evidente cartón piedra, y otros artilugios de poco lucimiento.

La historia no tiene ni pies ni cabeza; yo diría que está hecha a base de escenas que individualmente intentan emocionarnos, lo que ocurre es que cuando las escenas emocionantes no están incorporadas a una historia bien contada, que le haya hecho a uno sentirse cerca de los personajes e interesado en lo que les pasa, lo que se acaba sintiendo, al menos yo, es una especie de desazón ante tanta música épica y tanta mirada profunda de personajes que siguen siendo unos desconocidos.

La historia, en resumen es que un chiquillo se escapa de una cueva de extraterrestres donde le han enseñado a ser un asesino, siendo recogido en su huída por un señor feudal que le cuida "cariñosamente" como si fuera su esclavo, luego matan al señor y exilian a sus samuráis, que de pronto quieren mucho al chico asesino, quien ahora es un señor barbudo, y se pelea muy bien o muy mal dependiendo de las necesidades del guion...

Las escenas de lucha son irregulares, quiero decir que las hay muy malas y bastante buenas, en general les salen mejor las más realistas, y un poco ridículas las más "mágicas".

Los personajes desde mi punto de vista no valen nada, desde el protagonista interpretado por Keanu Reeves hasta el Shogun, que es un fantoche y no dice más que cosas sin sentido, disfrazado de una aparente profundidad. En general no paran de lanzarse miraditas y soltar frases grandilocuentes que no llevan a ninguna parte, como quien dispara al azar.

El conjunto de todo esto es que resulta una película bastante aburrida y que da cierta sensación de haber sido timado, de que no recibe uno lo que le habían prometido.

viernes, 24 de octubre de 2014

All´s Well that Ends Well - 1981 - BBC Shakespeare Collection

Traducida al español con dos títulos: "A buen fin no hay mal principio" y "Bien está lo que bien acaba".

Es una comedia de Shakespeare, poco popular en España, que sin embargo es bastante divertida e interesante, con un argumento más elaborado que las comedias de enredo.

El rey de Francia se muere, y para salvarlo se presenta Helena, hija de un famoso médico de quien ha heredado ciertos conocimientos de la disciplina. A cambio de su trabajo podrá elegir como marido al cortesano de su elección. Elige a Bertram, hijo de su protectora, quien dice que no consumará el matrimonio hasta que ella lleve el anillo de la familia, y esté embarazada de él mismo, cosa esta última imposible sin consumar el matrimonio. De esta manera Bertrand cree haber puesto una condición imposible de cumplir, pero Helena es inteligente y valiente, de modo que pondrá todos los medios a su alcance para obtener lo que desea.

Es una historia básicamente de mujeres; entre ellas tejerán una serie de engaños a favor del amor y del bien, o al menos de la virtud de la época, mientras que el protagonista, que no tiene nada de héroe, es sólo una marioneta que se cree poderoso y seductor, pero no puede evitar que las mujeres a su alrededor le lleven por el buen camino.

En general el autor es aficionado a escribir personajes de mujeres sabias y valientes, bien sea con una sabiduría destinada a los consejos y la ayuda, a cierta edad, como una sabiduría valiente y protagonista para las más jóvenes. Habitualmente la percepción femenina de la realidad es más afinada que la de sus compañeros varones, y también las determinaciones que toman ellas son más sensatas.

El tono, como decía, es de comedia, los actores cumplen, siendo a la vez solemnes y divertidos, como corresponde a su alta posición social, que debe ser mostrada como respetable al auditorio. La comicidad más irreverente se deja, como en muchas otras ocasiones, a los personajes secundarios, de más baja extracción, que representan el humor más básico, pero a la vez la sensatez y claridad de ideas del pueblo llano, por así decirlo.

jueves, 23 de octubre de 2014

Coriolanus - 1984 - BBC Shakespeare

Desde que leí el Coriolano de Plutarco, que hace pareja con Alcibíades, dentro de sus "Vidas Paralelas", como generales que primero triunfaron al mando del ejército de su país y más tarde al mando del ejercito enemigo, se convirtió en uno de mis personajes históricos favoritos, aunque, como parece pasar con muchos grandes nombres de la Roma republicana, se tiende a pensar que nunca existieron, que son ejemplos personificados de diversos comportamientos, un paso intermedio entre las épocas más legendarias de Eneas y Rómulo y Teseo y la época histórica propiamente dicha.

En todo caso el personaje es atractivo. Huerfano de padre desde muy niño, se dedica a educar su cuerpo y su mente para ser el más fuerte de los romanos, pero sin contar con nadie más, desde un punto de vista individualista que acaba convirtiendo su vida en un "uno contra todos". Según crece en fuerza y conocimiento va naciendo dentro de él un sentimiento de superioridad que lo aleja del pueblo.
Héroe en todas las batallas, pero enemigo de los plebeyos, que en ese momento están consiguiendo por fin su cuota de poder como habitantes de Roma, se tiene que exilar para salvar la vida, y se pone al servicio de sus enemigos, los Volcsos. Al frente de los cuales consigue recuperar el terreno perdido frente a Roma, y más.

Esta es la historia del personaje. Shakespeare, muy aficionado a las Vidas de Plutarco, lo recoge en esta obra, en el momento álgido de su vida: su fracaso político y el cambio de bando. En cuanto a su popularidad actual, el Coriolanus es una obra intermedia, digamos, que ni figura entre las más conocidas, ni de las prácticamente desconocidas para el lector y espectador español, que las hay, y muchas.

Hace poco se hizo una versión bastante potente para el cine, dirigida y protagonizada por Ralph Fiennes, y probablemente más entretenida que esta de la BBC, que, al estilo de Estudio 1, es más bien una versión teatral con pocas concesiones a las posibilidades de la televisión, y que presume de fidelidad al texto original. Ralph Fiennes trae la historia al siglo XXI, con uniformes y ambientación de guerra y política moderna, mientras que las adaptaciones de la BBC utilizan vestuario, digamos, Chespiriano, que desde mi punto de vista resulta más agradable, como las viajas traducciones de las obras antiguas, que estando igualmente lejos del original (la historia de Coriolano transcurre más de 20 siglos antes de Shakesperare), nos proporciona cierto sabor de fuera del tiempo, o, al menos, fuera de nuestra época.

El ambiente es oscuro y solemne, como corresponde a una obra más bien trágica. La versión de la BBC dura casi dos horas y media, con un inglés complicado, como iremos seguramente al hablar de otras obras de esta serie de la BBC Shakespeare Collection.

Maléfica - 2014 - Robert Stromberg

Algo está cambiando en el cine infantil, y supongo que en todas partes. Últimamente he visto Frozen y esta Maléfica, y tienen un punto en común que me parece interesante, y más aún por el hecho de aparecer en ambas películas: los hombres ocupan mucho menos lugar, son prácticamente historias sobre mujeres.

La clave está en el "beso de amor verdadero" que debe salvar a las princesas, resulta que es algo más difícil de encontrar de lo que parecía a primera vista, y que no es suficiente con que un príncipe azul aparezca de vaya usted a saber donde y le guste la chica que está dormida en una urna de cristal, o lo que toque, el amor verdadero es algo más difícil de encontrar, y sobre todo, por lo visto, sucede entre chicas.

Así que hay una clara moraleja en ambas: está bien el amor entre hombres y mujeres, pero no es imprescindible. Las
mujeres por su cuenta pueden tener una buena vida, en la cual la presencia de un hombre a quien querer es conveniente, pero no imprescindible, ni mucho menos.

No sé qué pensar. El mensaje en sí mismo es positivo aunque, como suele ocurrir, la ideología va a rastras de la realidad, y la es incorporación de la mujer al mundo del trabajo la que generaliza el tipo de vida que estas películas muestran, pero ahora, quizás, falta el personaje masculino. Le han quitado al papel de la chica lo que tenía de plano y absurdo, más aún, lo que tenía de dependiente, siempre con necesidad de ser salvada, la pobre, pero ahora sería conveniente hacer lo mismo con el papel del hombre, que se ha convertido en un complemento, y que además, parece que pasa a ocupar el papel de malo, dado que las buenas "importantes" son chicas.

En cuanto a la película en sí, me parece bastante equilibrada, en este difícil mercado del cine infantil que quiere convertirse en un cine "para todos los públicos", o sea, entretener también a los adultos que pagan. Es complicado acertar cuando se rehace toda una historia en función de la actriz principal a quien se le quiere dar todo el protagonismo, y Angelina Jolie ya ha quedado mal en otras ocasiones por ese exceso de postureo (vease "The Tourist"), sin embargo creo que esta vez lo han hecho bastante bien, y ella encaja en este papel de semidiosa que se expresa con leves cambios en el gesto, porque es todo lo que le conviene hacer, y porque parece que le cuestan mucho más los papeles de persona normal, por así decirlo. Además esa voz solemne de actriz antigua le sale muy bien, quizás no sea muy buena actriz, pero al menos ha encontrado el papel en el que sus defectos, principalmente su falta de naturalidad, se pueden convertir en virtudes, es el reverso femenino de Christopher Lee haciendo de Drácula.

Lógicamente hay excesos en la película, y algunas incoherencias, o al menos soluciones fáciles, respecto al carácter del Rey, al ayudante de Maléfica, etc. Pero creo que esas se disculpan bastante bien por el género fantánstico en el que se ubican. Estas adaptaciones de cuentos infantiles son complicadas, como demuestran las infumables Hansel y Gretel o Caperucita, y en este caso han conseguido un buen espectáculo visual, y una película familiar y bastante emocionante en algunos momentos, aunque les falte llenar algunos huecos del argumento.

No está nada mal para echar la tarde, y para comprobar como se hace un esfuerzo por cambiar los roles machistas en los que se sustentaban los cuentos tradicionales, ahora las mujeres no se matan unas a otras, se quieren mucho, y se enfrentan al enemigo común, que por desgracia parecen considerar que es el hombre.

miércoles, 22 de octubre de 2014

Cazadores de Sombras: Ciudad de Hueso - 2013 - Harald Zwart

El género de terror romántico adolescente ha llegado a límites absurdos con malas películas de gran éxito, pero por el camino también se ha dejado obras como esta, peores todavía y que ni siquiera han alcanzado la popularidad que parece ser su único planteamiento inicial, quiero decir que son películas claramente comerciales, pero que tampoco comercialmente han resultado especialmente bien.

Se trata de una especie de Buffy, una shadowhunter, quien, sin saberlo ella, proviene de una larga estirpe de caballeros Jedi, según va creciendo la niña se le va notando que no es muy normal, porque va dibujando un símbolo en plan macho cabrío por todas partes, y hace copias como si fuera un best seller.

Su madre y su padre, que están al cabo de la calle del asunto, se lo han estado ocultando todo el tiempo, pero llega un momento en que no puede ocultarse más, porque empieza a ver seres invisibles, y estos también se da cuenta de que ella anda por ahí.

Pues eso, carne joven, aunque desde mi punto de vista tampoco especialmente atractiva. La protagonista es Lily Collins, que parece estar de moda, y que a mí me suena principalmente por la película de Blancanieves Mirror Mirror, en la que no está mal, pero en esta película los actores no importan mucho, porque no hay por dónde cogerla. Está basada completamente en la presentación de unos personajes atractivos, cuya biografía y caracter hay que dar por hecho partiendo de su aspecto, y en efectos especiales correctos, pero que ya no sorprenden a nadie.

Merece la pena verla en una tarde de domingo con mucho sueño, para quedarse dormido y no acordarse de ella nunca más.