jueves, 23 de abril de 2020

Puñales por la Espalda - 2019 - Rian Johnson

Película de misterio, con un título muy misterioso en español, que nada tiene que ver con la trama.

Se deja ver, no es muy larga, pero reconozco que no acabo de captar el tono jocoserio que pretende seguir, a la vez como homenaje a la obra de Ágata Christie y como parodia de la misma. Creo que hubiera funcionado mejor como sátira, porque la trama es absurda desde el principio, y de ese punto de partida imposible, o absurdo, parece aprovecharse el autor para crear la intriga, pero hubiera sido mejor aprovecharlo para crear comedia.

En definitiva, no tiene ni pies ni cabeza, la película se apoya más que en la historia en el supuesto encanto de los personajes, especialmente los interpretados por Daniel Creig y Ana de Armas, y un conjunto de muy conocidos secundarios, pero de nuevo a mí no me ha llegado ninguno de ellos, quizás excepto Ana de Armas.

La película tiene buenas críticas y nominaciones a los Globos de Oro y Oscar, así que entiendo que esto que escribo es muy subjetivo, pero es como una versión light del Asesinato en el Orient Express que hizo en el 2017 Kenneth Branagh, con un toque de humor que la estropea, bien porque sobra, bien porque no llega, dependiendo de si uno clasifica la película como una obra de misterio con chistes o una comedia de misterio.

Para pasar una de estas tardes en casa ¿Por qué no? Pero también para olvidar pronto, un pasatiempo.

miércoles, 1 de abril de 2020

Anna - 2019 - Luc Besson

El director de Nikita parece que decidió repetir la película el año pasado, pero peor. A lo mejor no es peor, pero como ya hemos visto al personaje original, más la versión americana, más la serie, más la película de Hanna, que algo tiene, más la serie de Hanna, más las películas de John Wick... quizás esta película parece peor por la simple repetición.

Hay muy pocas novedades en esta película, si es que hay alguna. Es cierto que ahora se pelea mejor en el cine que hace unos años, con mucha más violencia y mucha menor carga emocional, se mata como quien hace deporte o juega al videojuego. Nos están educando, sin mala intención, en la idea de que la vida no vale nada, y no importa la cantidad de gente que uno mate, si es guapo y tiene buen fondo.

Reconozco que personalmente estoy harto de tanto asesino convertido en héroe, aunque sea una forma nueva de heroicidad, que consiste sobre todo en la estética, en ser guapo, vestir bien, ser una persona muy profunda, con muchas capas, como Shrek. Así, nos explican como una chica, prisionera de sus decisiones, que vive con un novio muy malote una vida sin esperanza, da un paso atrás para sumergirse en el todavía más duro mundo de la moda, donde las sesiones son interminables y los fotógrafos auténticos dictadores.
La chica es entrenada en muy poco tiempo para ser una asesina con auténticos superpoderes, aunque no les llamen así (los superpoderes ya son habituales desde hace mucho tiempo en las películas de acción, disfrazados como supuestas habilidades), y utilizada, sin mucha oposición por su parte, para acabar con objetivos.

Es curioso que la lucha moral de la mujer no consiste en que le moleste asesinar objetivos (así como también vigilantes de seguridad, soldados, y quien se cruce en su camino), sino en que no es libre, lo hace bajo las órdenes de otras personas, que además controlan su vida, y eso sí le resulta muy fastidioso, por lo visto.

En fin, es una revisión de Nikita, algo mala, y desde mi punto de vista un poco aburrida, en los tiempos de John Wick.